sábado, diciembre 21, 2013

Todos entrañables

Publicado en "Diario Menorca" el sábado 21 diciembre


JUEVES, 12

Un repaso a la prensa digital me hace sonreír con el presunto (luego resulta que no fue tal) ataque de celos de Michèle Obama con el selfie de su marido con la primera ministra danesa (de bastante buen ver), y me entero de que así se llama el autorretrato con el móvil. Pero es que los periódicos vienen hoy trufados de términos parecidos, así resulta que una tal Myles Circus hace twerking (simulación del acto sexual) con Papá Noël, que otros hacen drelfie (autorretrato en estado de ebriedad), que se ha puesto de moda el clubbing en lo que se llama “moda Morning Glory”, en clubes que abren de las 6.30 a 10.30 de la mañana y en los que no se sirve alcohol, sólo batidos y café, y que el Ayuntamiento de Barcelona lanza un app  para localizar las 1650 fuentes para beber que hay en la ciudad. Está claro que pronto no harán falta tils

Vuelvo a por la tarde-noche a la prensa y no se habla de otra cosa que del symposium “España contra Cataluña” o “del odio” según la prensa nacional, pero sobre todo, de la pregunta promovida por la Generalitat que es tan clara (en su complejidad) e inequívoca como la fulminante reacción gubernativa, “No se realizará”. Un bon  brou i bullit para las fiestas.

VIERNES, 13

En la  interesante encuesta realizada por GADESO hace unas semanas, se pone de manifiesto que los ciudadanos baleares, en su mayoría (un 55%) se sienten tan baleares como españoles mientras un 20% más baleares que españoles, un 12% más españoles que baleares, un 7% sólo baleares y un 6% sólo españoles. Lo que me ha llamado la atención es que la doble identidad balear-española es sensiblemente más baja en Menorca que en las otras islas: un 51% para los menorquines por un 56% para mallorquines y un 57% para ibicencos…

¿Ocurre lo que creo que ocurre?  Que no somos tan pocos los que nos sentimos  filobritánicos y que no nos hubiera importado  que se hubiesen quedado aquí  aunque fuera por no tener que ser compatriotas de tipos como Bono, Aznar o Rouco Varela  y  poder estudiar, sin necesidad  de estrambóticos tils, la modalidad menorquina del inglés (ull blec por black eye y cosas así).

SÁBADO, 14

Comida familiar en Madrid que me sirve para catar el recargado ambiente navideño de la capital de las Españas (algunos no se han enterado de que hay varias, y así nos va). Ya en la isla había notado un cambio luminoso en el semblante de mis congéneres en estos días de diciembre, que aquí, en la Puerta de Sol y relaxing Plaza Mayor se hace rutilante (y algo agobiante). A pesar de la crisis, se advierte en el febril azacaneo de la gente un deseo de felicidad por protésica que sea. Y está bien que sea así por lo menos una vez al año aunque preferiría ver sonreír en todas las estaciones del año por motivos nimios de la vida diaria que por este simulacro comercial-lacrimógeno (pienso esto en el viaje de vuelta, ante la imposibilidad metafísica de leer, siempre me tocan al lado todos los niños del avión).

       Por ejemplo, me gustaría que me devolvieran una sonrisa ( todo el año)  cuando cedo galantemente el paso a un coche aprisionado en una bocacalle o que me comentasen algunas palabras escritas capaces de suscitar un rictus amable o una disensión razonada, o que no estuviesen tecleando frente a mí todo el rato en una comida pretendidamente fraternal, o que  me sonrieran indulgentemente en vez de increparme con gesto amenazador cuando me equivoco de vía en una rotonda, o que mi mujer me dijera sí cariño cuando le imparto una conferencia sobre la necesidad cultural de ver dos o tres partidos ingleses en el fin de semana …

DOMINGO, 15

Termino la lectura de “Hospital Cínico”, la novela de mi amigo Diego Prado, un caso curioso de amistad, ya que de pequeñito jugaba a los vaqueros con su madre en  mi casa de la calle de Ses Moreres, y de mayor juego a escritores con él, un lletraferit que recrea en su novela el transcurso de un vertiginoso día en un gran hospital de Barcelona, convertido por la imaginación del escritor en un microcosmos con vida propia, en la que se mezcla la dolorosa realidad hospitalaria y la  fantasía onírica, con incursiones del personaje en el paraíso  y el  infierno que como sabemos, están ambos en nuestro interior, juntos y revueltos. Son varias novelas en una y como tal  la presentaremos el día 30 en la Llibreria Catalana.

VIERNES, 20

Revival: Ley mordaza para manifestaciones, digna de los tiempos de plomo, Ley del Aborto que nos retrotrae a 1985, ley Wert de involución autonómica y restauración confesional, Santiago y cierra España en el asunto catalán, y como guinda, la balear Ley de Símbolos”, un esperpento censurador. Más vale tomarse cuatro copas para digerir tamaña Reconquista.

Bones festes a tothom.

domingo, diciembre 01, 2013

Como los cangrejos

Publicado en "Diario Menorca" el sábado 30 Noviembre


JUEVES, 21

Que la plétora de memorias (abrillantadoras, paso de ellas) de políticos no nos impida ver el bosque: la discrecionalidad de la nueva ley de “Protección” de la Seguridad Ciudadana es máxima: ¿se instaurará un insultómetro para calibrar la cantidad a pagar? ¿100.000 euros por llamarles cabrones, por ejemplo? Parece que entramos en el túnel del tiempo. Y ahora viene la nueva ley del aborto… Y cuidado que no acaben resucitando la de vagos y maleantes. A ver.

VIERNES, 22

 Después de una comedida reunión profesional (sólo una horita, una delicia), me reúno  en “Sa quinta punyeta” de Palma con una amigas menorquinas casadas con sendos mallorquines.

-Os gusta demasiado el dinero-abre el fuego una de ellas-, de ahí que buena parte de vuestra casta política esté en la cárcel.

-Digamos que aquí nos molesta más el que es un coó que el pícaro. Es esencial que el capitalismo funcione sin complejos.

-Por diferentes que seáis unos de otros, todos os entendéis: la mallorquinidad os une, una  picaresca vatuadell sagrat que sólo margina a los coóns y, si os rascan un poco, también, ¡todavía!, a los xuetes. En realidad  no sois más que una tribu  con dobbés y escasos escrúpulos.

 -Es que los menorquines os  preocupáis demasiado por el tiempo en general y el viento en particular-vuelve a replicar el mallorquinot-, que si sopla de aquí o de allá y si os vais a mojar o no. A nosotros eso jamás nos ha preocupado. Somos gente de acción Y no nos ha ido mal.

-En realidad sois uns coóns, pero no os dais  cuenta- apostilla mi amiga entre resignada y divertida, mientras brindamos por sa balearitat (?)

Debería  ir a Palma con más frecuencia.

Nota: Al parecer, un coó es un beneit, o sea, un simple, lo que aquí sería quizás un babau.

SÁBADO, 23

En la vuelta a casa coincido en el avión con un ex político (¿dejan de serlo alguna vez?) agarrado a una de esas biografías ¡de políticos! Le digo que sí, que me parece muy interesante cuando me manifiesta su entusiasmo por tal figura, pero que cuando leo ficciones prefiero a mis novelistas de cabecera, mientras acaricio el lomo de “Operación Dulce” de Ian Mc Ewan…

Ni la cellisca ni los tres o cuatro grados menos de temperatura con respecto a Palma nos disuaden del habitual paseo sabatino por Sa Plaça y alrededores, osadía que nos reporta un inesperado premio: la tapa de canaló de savia  y un espléndido vino en el nuevo Q-u-s-i-n-s de la Plaza Miranda. Y la tramontana que bufi.

DOMINGO, 24

Dice Es Diari que el caso Citur sobre presuntas irregularidades en el área de Turismo del Ayuntamiento de Ciutadella puede quedar devaluado (en cuanto a penas), a causa de la prolongada dilación de sus actuaciones. También el Gürtel promete sobreseimientos varios por prescripción de delitos (presuntos). Mientras tanto, nuestros tribunales entran a saco ¡en el Tibet!, y el presidente del Constitucional sigue siendo un destacado militante del partido en el Gobierno, y nadie parece levantar una ceja…

Por la noche, un reportero de La Sexta pregunta a los diputados populares valencianos por qué firmaron la petición de indulto a un alcalde corrupto. Mientras la mayoría farfullaba incoherencias, uno de ellos fue más decidido “¡Porque es amigo mío¡”, exclamó, ufano, en una demostración palmaria de la regresión no sólo del espíritu de la justicia y  la política democrática, sino de la especie.

MARTES, 26

Las últimas encuestas sobre violencia de género arrojan resultados aterradores: se triplican entre las menores de 20 años. Sigo sin entender la inquina de la derecha española a un tratamiento de fondo, integral, en los colegios. ¿Tan difícil es aceptar que se les enseñe a los niños la igualdad hombre-mujer, el repudio del racismo y la homofobia, el respeto a la naturaleza o la bondad intrínseca de un espacio público común a todas las ideologías y formas de vida? En vez de ello, llámese Educación para la Ciudadanía, Fomento del Respeto y la Tolerancia, Formación del Espíritu Cívico, o lo que se quiera, vuelve la religión evaluable a las escuelas y se favorece la segregación por sexos… Anem com els crancs.