sábado, marzo 26, 2011

El mundo al revés

Publicado en "Diario Menorca" el sábado 26 de marzo

18-III-11
Pues no, no es lo mismo. Pese a los voluntariosos intentos de algunos medios por equiparar la unilateral y descabellada invasión de Iraq con la pautada, consensuada, y validada por la ONU, intervención en Libia, no van a conseguir disfrazar la realidad. Lo que se hizo en Iraq fue una demostración hormonal de los neocons, a base de mentiras cósmicas y sin autorización del Consejo de Seguridad, para escarmentar indiscriminadamente por el 11-S. Aquí se trata de impedir una catástrofe humanitaria cumpliendo una resolución de la ONU. Poco que ver, aunque guerra es guerra que diría un boskov de la política internacional, y cuando se entra en ella se han de tener los objetivos muy claros. Ésta es la gran duda.

19-III-11
Hablamos en la comida sabatina con unos amigos madrileño-menorquines de diversas peculiaridades españolas y nos detenemos en su carácter de reserva mundial de la piratería cibernética y de un laicismo casposo que poco tiene que ver con la acreditada laicidad francesa que, sin embargo, sigue llamando Pâque a la Pascua.

20-III-11
Interesante artículo dominical de Enric Juliana en La Vanguardia para desmantelar un socorrido mantra de los liberales de toda la vida, el que dice que los impuestos los pagan las personas y no los territorios, con toda la intención de ensalzar al individuo y mandar al discrepante al limbo del nacionalismo ceporrro, argumento utilizado reiteradamente en el asunto de las lenguas, pero esa sería otra.
¿Qué pasa pues con las subvenciones europeas a España (“territorio”, of course) que han fluido en los últimos lustros como un maná? Si fueran, como dicen los liberales, de las personas, nos hubieran tocado ciento treinta euros per capita y año, han calculado unos investigadores. Los territorios no pagan, concluye Juliana pero cobrar, cobran, y mucho, por razones de equidad y justicia que ni siquiera pueden discutirse ¡treinta años más tarde!... So pena de excomunión por insolidarios.
Más tarde, en el puerto luminoso, fugaz encuentro con un madridista eufórico:
-Este año, la Copa del Rey vale por cinco- me dice.
-Ah, ¿sí?
-¿Por qué sonríes así? -me pregunta.
-En verdad en verdad te digo que hubo un tiempo en que el madridismo consideraba la Copa como un título regional que podía ganar incluso el Barça mientras ellos iban a lo suyo que es Europa…
-¿Ah, sí?
-Oh, sí.

21-III-11
“En periodismo, la claridad es un valor. Y en narrativa lo es la ambigüedad, cuantas más lecturas tenga una novela, mejor. En periodismo escribo lo que sé, lo que pregunto. Y en novela escribo lo que no sé, lo que me pregunto. Mi corazón es la ficción que ha sido mi juego vital desde niña. Lo otro es oficio”
Rosa Montero, en unas recientes declaraciones, me viene como anillo al dedo mientras manoseo embelesado el primer ejemplar de la novela que presentaré el próximo 8 de abril en mi Ateneo… Lo mío no es oficio ni beneficio, pero me lo paso en grande urdiendo historias, y no te digo nada publicándolas.

22-III-11
“Pautada, consensuada…”, decía más arriba con respecto a la intervención internacional en Libia. Pues parece que el consenso se agrieta por discrepancias en quién debe mandar la coalición, ante el regocijo de los antiguamente guerreros, hoy pacifistas conversos. Es curioso repasar la prensa: el mundo al revés, los de la zeja por la guerra humanitaria mientras los belicosos de antaño, blanden el “Haz el amor y no la guerra”, con tal de darle en la cresta a Zapatero, un cadáver político ambulante al que quieren negar una digna sepultura…

23-III-11
Se va Liz Taylor, a la que siempre recordaré en “Gigante” parándole los pies a James Dean, y como esposa orgullosa de un Rock Hudson vapuleado en un bar de la América profunda por defender a su nuera mestiza.

24-III-11
El consumo moderado de vino tinto puede jugar un papel protector contra la degeneración macular asociada a la edad, una de las enfermedades oculares más invalidantes, según la Ocular Surgery News de febrero del 2011. Según la revista, el consumo habitual de vino podría explicar la llamada “paradoja francesa”, la baja incidencia de enfermedades cardiovasculares en Francia comparada con otras poblaciones con una ingesta parecida de grasas.
Idò, no todo van a ser malas noticias ni todo lo exquisito es pecado, ni generador de colesterol… ni susceptible de multa. Algo en su sitio, al fin.