sábado, octubre 27, 2012

Sonrisas y lágrimas

Publicado en "Diario Menorca" el sábado27 Octubre


19-X-12

En espera del acto de apertura de curso en el Ateneo y, tras lamentar la incomprensible coincidencia horaria con el debate en el Foro Menorca de Economía, desgrano una ristra de recuerdos: mi primer discurso, la primera vez que hablaba en público, a comienzos de los ochenta, con Camilo J. Cela,  padre,  de conferenciante y en presencia del gobernador militar y el obispo de la diócesis, un trago nada fácil; cómo no rememorar el último, tras siete años de presidencia y veintidós en la junta directiva, ante Luis Ángel Rojo, gobernador del Banco de España, cuando anuncié-con voz un tanto quebrada- mi renuncia, tras comprobar que había perdido impulso…

Y siempre el secretario Paco Fábregues en el centro del torbellino de la memoria: mi principal apoyo, mi amigo, mi confidente, el meticuloso traductor que daba forma a mis balbuceos en catalán, la lengua de mis ancestros que no había podido aprender de niño. Siempre que me acerco por la secretaría, ahora notablemente más ordenada (la mano femenina of course), me parece verlo adherido a su sempiterno cigarrillo de caldo, aureolado por la ironía casolana que nunca le abandonaría. ¡Cuánto merodeo juntos por la sala de actos, atronadoramente  vacía cinco minutos antes de un acto en el que habíamos depositado todos nuestros afanes! “¡Ja n´hi ha una dotzena!”, me tranquilizaba él cuatro minutos después…

Recuerdos, vivencias impagables, y una inmensa gratitud hacia la entidad que no sé si me hizo más culto, pero sí, indiscutiblemente, más civilizado. Enhorabuena y ánimos a la agosarada presidenta.

20-X-12

Camilo José Cela hijo nos hablaba anoche de belleza y su correlato cerebral. Luego, en Ses Forquilles, A.S me recordaba una cita apócrifa: “La belleza no es más que la búsqueda de la felicidad”. Pero para quienes no creemos en la felicidad (estado permanente, y por tanto inalterable, utópico, de beatitud), sino solamente en la alegría de vivir, el engarce de alhajas / buenos momentos, la belleza no es más que una evasión. Como decía Oscar Wilde, todos estamos en la cuneta, pero algunos miramos a las estrellas. Me gustaría ser de esos.

Y de evasión a evasión. Tarde de cine. A la salida, una pareja-ella visiblemente consternada-me preguntan (ociosamente, ya se lo imaginan) qué película he ido a ver.

          -Woody Allen, por supuesto. Casi dos horas con la sonrisa puesta-les confirmo.

          -Pues yo me he puesto morada (blava) de tanto llorar-me contesta ella.

          - ¿Algo  de maremotos lacrimógenos?-pregunto, también ociosamente.

           -Sí, hip.

           -Allá vosotros.

22-X-12

“Ganan las vigas maestras” reza hoy el titular de La Vanguardia, el más expresivo de los que he encontrado en la prensa, más allá del notablemente exagerado “Respaldo absoluto a Rajoy” de La Razón, aunque bien es cierto que el  contundente triunfo de Feijó en Galicia no deja de ser un alivio para el atribulado presidente del Gobierno, mientras el desplome socialista es el epitafio de Rubalcaba.

Y es que el PP en Galicia y el PNV en el  País Vasco son dos pilares inamovibles que ganan una y otra vez las elecciones en sus respectivas comunidades, y este es un hecho democráticamente inobjetable que por una parte es un lenitivo para el Gobierno, pero por otra, la vasca, plantea otro problema político de primer orden: ¿Cómo afrontar una mayoría tan arrolladora del llamado soberanismo, más allá de los consabidos exabruptos de la caverna mediática madrileña?

Claro que es poco probable que los vascos planteen un órdago como el de los catalanes. A ellos les va muy bien con esa anomalía jurídico-constitucional  que es el Concierto Vasco  y sobre el que Europa plantea cada vez más objeciones. No, no creo que los soberanistas  vascos soberaneen  demasiado.

23-X-12

En el frontispicio del Ministerio de la Verdad, que describe George Orvell en “1984”, podía leerse: “La guerra es la paz” “La libertad es la esclavitud” “La ignorancia es la fuerza”, apoteosis de la neo lengua de la legendaria novela. A partir de ahora podríamos añadir algunas frases más: la ya mítica de Rajoy de “Haremos lo que hay que hacer”, la del catalán Homs “Nos manifestamos para ser lo que somos” y  la más reciente pero no menos genial del Govern  de les Illes, para hablar de  la lengua catalana  sin mencionar su nombre: “La lengua cooficial distinta del castellano”. Genial.

24-X-12

El 21% de los españoles en el umbral de la pobreza. Todo lo escrito hasta aquí palidece. ¿Qué decir? ¿Cómo no llorar?  No es más que el precio de la desigualdad al que se refiere Joseph E. Stiglitz en un imprescindible libro al que inevitablemente volveremos. Y es que el 1% de la población tiene lo que el 99% necesita…