VIERNES, 16
Tarde repleta de actos institucionales y sociales, festejos callejeros más o
menos impostados, otros genuinamente populares como las torrades de sobrasada, conferencias y cómo no, la ya tradicional cena de Es Diari a la que acudí en sus inicios como miembro del jurado
(como redactor más antiguo, etcétera), e incluso como muñidor, con Fernando
Serrano, de unos antediluvianos y esperpénticos premios naranja y limón hasta que fui felizmente exonerado de tales
menesteres. En fin, recuerdos de cuando nuestro periódico no era más que un
voluntarioso “cuatro hojas” Ocurría esto en los últimos sesenta, es decir que mientras en
París los jóvenes lanzaban adoquines al Poder uno se dedicaba a premiarle con
frutos autóctonos, gajes de pertenecer al establishment
(Tomeu Gili dixit) desde la noche de
los tiempos.
Ante la extrema dificultad de elegir
correctamente dónde ir y por no
decepcionar al líder mahonés de Ocimax
José Luis Portella que sé que me estará esperando, opto por ir a ver la première mahonesa de la última película de
Woody Allen, más bien discretita, pero que me permite terminar el día con la
sonrisa puesta. Siempre comparo a Woody con Johan Cruyff cuando decían que solo
sacaba fueras de banda… Sí, pero cómo los saca, respondía el alleniano/cruyffista. Y sigue en ello.
SÁBADO, 17
Sant Antoni gloriòs! Mañana fría pero apacible, con
rayos de sol hendiendo unas nubes preñadas de malos augurios. Peregrinamos con
Inés de animal en animal mientras trato de adecuar los golpes de hisopo de mossen Sastre al universo mágico de la niña. Bajamos
a la pescadería donde proseguimos, entre cañas y hojaldres de butifarró de Angels, el debate sobre Charlie Hebdo con un amigo madrileño culto y reflexivo que,
habiendo seguido y admirado muchos años al semanario satírico, da la razón al
Papa Francisco en su admonición: no hace falta meter el dedo en el ojo a la
gente para hacer humor… Blasfemar sí, pero dentro de un orden, no hace falta
dibujar a Mahoma sodomizando a fieles o infieles.
Puede que sea así, de hecho es un
debate sangrantemente abierto, pero en cualquier caso no me convence la
metáfora usada por el Pontífice, teniendo en cuenta que uno de los substratos principales del
cristianismo, su rasgo más atrayente, es el del amor fraterno, el perdón, poner
la otra mejilla etcétera, y eso no casa
mucho con ir repartiendo puñetazos a poco que te menten a la madre. También la
campechanía tiene sus límites.
DOMINGO, 18
Tras la ensaimada de rigor, repaso de
prensa, empezando cómo no por Es Diari, en
el que busco la magnífica serie Menorquins
al món en el que la hija de unos amigos explica su aventura vital en Japón,
abriéndome mi apetito viajero. Veremos. Pero hoy no falta la retahíla de
fotografías del sopar gran de Sant Antoni,
un clásico del día con pleno de autoridades. Como diría Tomeu, si no estás en
esas fotos no eres nadie, pero es lo que ocurre si dejas de ser cosa o te provocan alergia las
celebraciones con más de seis personas…
Veo con estupor en la prensa nacional
el paseíllo en Mondragón de los restos mortales del gudari Bolinaga, autor de varios
asesinatos y del ignominioso secuestro de
Ortega Lara, en una palmaria demostración de la catadura moral de los
oficiantes, incapaces todos de un elemental “lo siento”. ¿Hubiera sido posible
semejante espectáculo en cualquier país occidental? ¿En la Francia de Charlie Hebdo? ¿Tendrá lugar alguna vez
una catarsis moral en el País Vasco del “todo por la patria”?...
Leo con curiosidad la información
sobre las “maniobras de ciberguerra a orillas del Atlántico”, en las que EEUU y
Reino Unido lanzan ejercicios y equipos mixtos de expertos para responder a la
oleada de ataques informáticos… También veo avances en el sexo virtual, toda
una esperanza para los adolescentes de la vejez, pero al mismo tiempo me alegra
que el libro de papel resista los embates de los e-books lo que implica la permanencia de los templos más hermosos y
útiles: las librerías…
Celebramos el fin de la diada en la intimidad y cómo no, en el puerto, con un soberbio
arroz de caragols y cranca que nos prepara el maestro arrocero José
Fluxá, hasta que las sombras del atardecer hielan el ambiente y tocan a rebato
los estornudos…
MIÉRCOLES, 21
Prosiguen también los festejos del
guiñol político con el tan estelar como patético ejercicio de prestidigitación
de los líderes del partido en el Gobierno. Nada por aquí nada por allá, no
conocemos a ningún corrupto, no tenemos nada que ver con esa persona, no es lo que parece. Y no se quedan atrás los socialistas, con una vistosa sesión de
lanzamiento de dagas contra un perplejo y asustado Pedro Sánchez… Entretanto, los
de Podemos sonrientes y aplaudiendo en primera fila.