Los partidarios de un turismo no convencional, es decir quienes busquen algo más que sol y playas vírgenes en Menorca, tienen una cita ineludible: una visita a S'Illa del Rey. Y no tanto por su belleza natural o interés arquitectónico como como prueba palpable de la fuerza de la iniciativa cívica.
Elegida por los británicos como sede de un hospital para sus tropas, continuó funcionando hasta mitad del siglo pasado, cuando el Hospital Militar fue trasladado a la ciudad de Mahón, frente al actual colegio La Salle en la carretera del Aeropuerto ( hoy en estado de demolición). Quienes peinamos calvas respetables aún nos acordamos de las barcazas trasportando enfermos desde el muelle de las Fontanillas en Es Castell...
Desde su abandono por parte del ejército, la historia de la Illa del Rey fue la crónica de un abandono anunciado en el que se produjo un terrible expolio de sus estructuras. Las administraciones, incapaces de asumir sus responsabilidades, echaban pelotas fuera, hasta que hace unos pocos años, un grupo de ciudadanos concienzados y dispuestos a trabajar "gratis et honorem", encabezados por el dinámico general mahonés Luis Alejandre, decidió toomar la iniciativa de la recuperación de la isla.
Y bueno, el resto se lo contarán ellos mismos si deciden hacerles una visita. Todos los domingos, de 8.30 a 9h, sale la zodiac de los "amics de S'Illa del Rey" desde el muelle de Ses Fontanillas en Es Castell. Allí, el amigo Sema les explicará la historia del lugar y los planes de rehabilitación. No se lo pierdan.