25-I-08
Reconfortado al comprobar que los brookers no van a caer defenestrados sobre nuestras cabezas como en el crack bursátil del año 29 del pasado siglo, me fijo en otras noticias de prensa, como la del automovilista que demanda a la familia del joven a quien ocasionó la muerte en accidente de tráfico hace tres años, porque “yo también soy una víctima”, según afirma el pintoresco (?) personaje, y porque “ aunque no necesito el dinero, no tengo por qué renunciar a él”. ¿Estamos ante un genuino producto del individualismo posmoderno o simplemente ante el consabido cafre de todos los tiempos?
Reconfortado al comprobar que los brookers no van a caer defenestrados sobre nuestras cabezas como en el crack bursátil del año 29 del pasado siglo, me fijo en otras noticias de prensa, como la del automovilista que demanda a la familia del joven a quien ocasionó la muerte en accidente de tráfico hace tres años, porque “yo también soy una víctima”, según afirma el pintoresco (?) personaje, y porque “ aunque no necesito el dinero, no tengo por qué renunciar a él”. ¿Estamos ante un genuino producto del individualismo posmoderno o simplemente ante el consabido cafre de todos los tiempos?
26-I-08
Quienes puedan pensar que una conferencia sobre cultura clásica “es algo para intelectuales” se equivoca de lleno. Para salir de su error bastaría con que se pasasen un sábado de ciclo por el Ateneo para comprobra cuánto se pueden divertir escuchando el relato de las andanzas de los literatos de los tiempos grecolatinos. En esta ocasión, el profesor Alvar, de la Universidad de Alcalá, nos pone en la pista de Marcial, el primer epigramista de la historia, o lo que viene a ser lo mismo, el inventor del chiste, un pionero en el arte de alejarse de uno mismo...para no tomarse demasiado en serio. “Mis libritos, escribía Marcial, saben respetar este límite: respetar a las personas, hablar de sus vicios”
La conferencia deviene en una oda al sentido del humor, que no es privativo de derechas o izquierdas, aunque actualmente en nuestro país, afirma el catedrático, parezca que la derecha lo haya perdido completamente. ¿Será éste y no otro el motivo de la malhadada crispación? Cuán lejos los tiempos de aquellas deliciosas sesiones de esgrima parlamentaria, como cuando el ilustre político conservador José María Gil Robles contestaba a la impertinencia de un diputado graciosillo que había aludido a sus legendarios calzoncillos de seda, con una antológica réplica: “No sabía que la esposa de su señoría fuese tan indiscreta”...
27-I-08
Josep Mª Quintana reflexiona en Última Hora sobre el 68 del pasado siglo, su generación, que es la mía, y su propia vocación política con una sinceridad apabullante: “Nos hicimos revolucionarios pero con los bolsillos llenos y siempre con un plato de comida en la mesa”, “hemos sido una gente preocupada solamente para vivir bien y arreglar nuestros propios intereses”...
Éste es precisamente el reproche que me hacen en mi blog un día sí y otro también mis neoliberales de guardia permanente, sobre todo si cometo la imprudencia de relatar alguna comilona de domingo invernal. En mi descargo puedo decir (y no precisamente como timbre de gloria) que nunca he tenido ni vocación ni tentaciones de entrar en política, ni mucho menos ilusiones revolucionarias (mi ideal nunca sobrepasó el modelo sueco, aunque en mi fuero interno me conformaba, con ser europeo), cautivado siempre por mi pasión periodística y limitado por las exigencias de una profesión como la medicina especializada ...¿Debí, a pesar de todo? No creo que la política se haya perdido gran cosa.
28-I-08
Gloriosas seques de gener que nos permiten pasar por alto el cartel de cierre”por vacaciones” que han puesto muchos bares y restaurantes en este soleado enero. Los paseos por el campo y /o a la vera del mar suplen carencias, pero ¿qué será de nosotros cuando arrecien vientos y tempestades sobre el far west mahonés de los fines de semana? ¿Desestacionalización?:¡Ja!...La despedida de “La Morada” no hace sino añadir melancolía, me recuerda, por su intensa carga emotiva, el cierre del añorado “Rocamar”.
29-I-08
Afirma el catedrático polaco de Sociología Zygmunt Bauman en su interesante aunque vaporoso libro “Vida líquida” que la democracia ha sufrido un golpe de estado neoliberal, cuyo objetivo es privatizar la esfera pública y eliminar la utopía social. La utopía de la modernidad, dice, se ha convertido en blanco y presa de llaneros, cazadores y tramposos solitarios: uno de sus muchos trofeos de la conquista y la anexión de lo público por lo privado.”
No sé si el llamado “caso Leganés” sobre sedaciones terminales a pacientes desahuciados entraría en la tesis de Bauman, pero lo cierto es que el golpe asestado por el gobierno de la Comunidad de Madrid a la medicina pública española ha sido demoledor, por la desconfianza generada entre los usuarios y el resquemor de unos profesionales puestos en la picota. El motivo no era otro que entablar una guerra preventiva contra la eutanasia, que tiene poco que ver con sedar a un paciente terminal para paliar su sufrimiento, práctica que admite hasta la propia Iglesia y que es lo que se hacía en el servicio de urgencias de Leganés (desde entonces parece que los pacientes sufren bastante más en sus agonías, para gozo de integristas de bata blanca y corazón negro).
El fallo de la Audiencia Provincial de Madrid niega la mayor y exonera a los médicos del corrosivo estigma de la “mala praxis” deja en evidencia al gobierno de “Espe” y a los aguerridos columnistas que, incluso en algún medio insular, hablaron irresponsablemente de “genocidio”, “caravanas de la muerte”, “asesinatos en masa” o llamaron al equipo de urgencias del Severo Ochoa “Sendero Luminoso” (una de las brilantes ocurrencias de Federico). Pero nadie parece dispuesto a pedir disculpas en este reino de la jeremiada que es nuestro país de países y lo que es peor, se pasa de puntillas sobre las flagrantes carencias de cuidados paliativos en nuestro país.
30-I-08
Otro fin de semana sir poder ir al cine: no echan ni “Interview” de Steve Bushemi ni el “Valle de Elah”, ni “Michael Clayton” ni “Expiación” ni por supuesto la ya desahuciada para cineastas menorquines “Conversaciones con mi jardinero”. Con el Real Madrid de líder incontestable y la campaña electoral en pleno apogeo, como febrero empiece a enseñar sus gélidas garras, la situación se hará insostenible.